Dentro de este círculo rojo hay ocho
puntos blancos que se mueven en círculos como si rodaran dentro del mayor ¿no?.
Pues en realidad no. Cada uno de los puntos o círculos más pequeños describe una
trayectoria recta de ida y vuelta a lo largo del diámetro del
mayor.
Si nos fijamos atentamente en el movimiento de uno solo de esos círculos e ignoramos los demás podemos apreciar su auténtica trayectoria. La unión de todos los puntos blancos, sin embargo, genera la sensación de que se mueven en círculos.
El efecto no es más que otro vistoso resultado de la ley de cerramiento, uno de los principios que rigen la corriente moderna de la psicología conocida como Psicología de la Gestalt y que ya hemos visto antes por aquí. Según esta ley tendemos a percibir varios objetos en movimiento como un todo. En el vídeo tras el salto puedes apreciar con más claridad el movimiento de cada objeto en esta preciosa representación matemática que engaña al ojo...
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