EGIPTO: GANA EL PUEBLO DESPUÉS DE 18 DÍAS DE REVOLUCIÓN PACIFICA –EL MUNDO CAMBIA ANTES NUESTROS OJOS

La emoción por lo que sucede en Egipto, se extiende por todo el Mundo como un reguero de pólvora, gracias a la inmediatez servida en directo, por las televisiones y emisoras de radio.

Los mejores deseos para que se cumplan las dignas aspiraciones del Pueblo Egipcio, también se extienden entre las personas a escala Mundial.

Las complejas relaciones Geopolíticas de los países del Mundo, sin duda alguna, también cambian, ya nada será igual. Antes nuestros ojos, el mundo va dando giros extraordinarios, los grupos de Poder políticos y religiosos, también cambian y estamos siendo testigos y participes, de otras señales que han ocurrido hace poco y de otros cambios que intuimos que van a seguir ocurriendo.

Hay lecciones que sin duda, tenemos que extraer, entender y aplicar en todo el mundo.

La Fuerza y el Poder del Pueblo Unido ante las Injusticias, son capaces de cambiar el Mundo.

Una lección, que tenemos que aprender todos los que sufrimos injusticia de los gobernantes, la misma lección que tiene que aprender los gobernantes, que lo hacen sin Justicia sobre sus ciudadanos.

¡Una lección que nos ha dado el Pueblo Egipcio!.

¡LOS BORREGOS SE REVELAN CONTRA LOS PASTORES!

Cuando descubrimos, que muchos de los dogmas que hemos sostenido, que muchas de la “Verdades” con las que vivimos son falsas y que durante todo este tiempo, hemos formado parte de una civilización, basada en Grandes Mentiras, comprendemos que nada es sostenible ni inmutable.

¡TODO CAMBIA!

Nuestro hermoso planeta no se creo para que seamos esclavos de los “señores”, de los “otros”, nosotros no hemos nacido para ser esclavos.

Nosotros somos Seres Libres.

Pero si no nos rebelamos, si no hacemos nada, para conquistar la libertad, estamos justificando las acciones de los “Otros”, estamos afirmando nuestra esclavitud y dándoles la llave de nuestra libertad a “ellos” para que decidan por nosotros y que nos digan lo que debemos hacer, ser, sentir y en definitiva pensar.

Estas grandes revoluciones, no requieren de una iglesia, una mezquita o un templo, es algo profundo y personal, que nace en el interior de las personas y que se contagia de unas a otras para unirse, por un ideal común:

LIBERTAD

¡Al Hamdu Lellah!