DRUIDAS: EL ARBOL DE LOS SUEÑOS

EL ÁRBOL DE LOS SUEÑOS

En las Escuelas del conocimiento de los Maestros Hab-Baa-Ssi, aparte de los grabados en piedra que están destinados al despertar de la Intuición, el Conocimiento de la Maestra Interior y a las comunicaciones con los Maestros, que se dan en las tres primeras escuelas, tiene una cuarta que esta dedicada a las distintas formas de diagnostico y sanación, de los cuerpos físico y energético.

En las Escuelas entraban los niños y niñas a la edad de siete años, cuando llegaban a la cuarta Escuela ya todos podían ver las energías, y por tanto podían tener formas diferentes de diagnostico y de sanación, pero también eran constructores de medios para eliminar las enfermedades en las familias, y que al mismo tiempo eran útiles y prácticos.

El árbol de los sueños, es uno de estos instrumentos que ellos fabricaban y durante las trece lunas, el tiempo que estaban en esta última escuela, todos tenían que hacerse uno, y al mismo tiempo que sus manos trabajaban la madera, sus mentes iban poniendo en aquel trabajo sus mejores deseos.

El árbol de los sueños se cree que fue un primer trabajo de un pueblo que existió en la antigüedad y que se les llamó los druidas, y dada su utilidad y el hecho de que aquel...
pueblo viviera de forma preferente en cuevas, es posible que tuviera una gran expansión.

Los Maestros Hab-Baa-Ssi, lo mandaron como regalo al Rey Salomón, con una de sus hijas y de este regalo se tienen detalles y características que dan a conocer que ellos lo perfeccionaron, pues sus medidas, cien centímetros de largo por veinticinco de ancho y diez de grueso, en la parte soporte de los velones, y que estos estuvieran separados en dos grupos de cuatro a diez centímetros cada uno y que en el centro hubiera un eje que contenía un tapón en su parte superior, utilizado para apagar los velones, indicaba que eran utilizados como instrumentos de ensoñación, para llegar a niveles de meditación y oración profundos.

De igual manera la altura del árbol de los sueños, indicaba que podía encontrarse a la altura de los ojos estando en posición de sentado, y el hecho de que todo el fuera de madera negra, posiblemente de ébano, indicaba que el movimiento de la llama de las velas y la negrura del árbol, acentuaba el efecto esperado.

De sus velas se conoce que las de los extremos, eran apropiadas para espantar a todo tipo de insectos, y que las dos siguientes, emitían un olor agradable y somnífero, siendo ambas de colores diferentes, a las cuatro del centro, que eran blanca amarillentas y que emitían una luz centelleante y calida.

En un escrito encontrado con este tema, se explica, cómo se tiene que utilizar:

“ Se colocará en el lugar preferente de la casa, en un lugar donde todos busquen reposo y respuestas a los problemas, se tendrá apagado durante el día, y tan solo después de la caída del sol, se encenderá cuando se encuentre uno enfermo y tenga problemas, lo que indica que no son velas para iluminar, la noche es el tiempo de de la restauración del cuerpo físico, del energético y de la mente, y este era un instrumento de ayuda  eficaz para conseguirlo.