El feligrés más fiel de la iglesia milanesa de San Ambrosio en Vigevano es un dinosaurio. En una de las losas que soportan la balaustrada de la iglesia puede apreciarse claramente una sección horizontal del craneo de un dinosaurio, que ha atendido impasible a todas las misas de los últimos 5 siglos.
Según Andrea Tintori, el paleontólogo de la Universidad de Milán que realizó el descubrimiento cerca del altar de la iglesia, “la roca contiene lo que parece ser la sección horizontal de un craneo de dinosaurio. La imagen se parece a las que toman los escáneres tipo TAC (Tomografía Axial Computerizada), y muestra claramente el craneo, la cavidad nasal, y numerosos dientes”.
Los restos miden aproximadamente 30 cm. ¿Cómo llego esta sección horizontal del craneo a una losa de una iglesia? La respuesta es sencilla: Cuando la iglesia fue erigida en 1532, se tallaron losas de roca calcárea del suizo Monte San Giorgio, muy rico en fósiles (tal como acredita su inclusión en las listas de Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO). Por mera casualidad, una de... estas losas acabó incluyendo parte del craneo del ahora famoso dinosaurio. “Este tipo de roca, llamada Broccatello data geológicamente del Bajo Jurásico, hace aproximadamente 190 millones de años” aclara Tintori. Aunque todavía no está claro a que tipo de animal pertenecía el craneo, como se han hallado otras losas en la misma iglesia con otros restos craniales, el profesor Tintori espera poder resolver el misterio por medio de una reconstrucción computerizada tridimensional.
No hay comentarios:
Publicar un comentario