Y lo hacemos de la mano de un árbol sorprendente: El Eucalyptus deglupta, al que se conoce con muchos nombres: En ingles lo he visto nombrar El eucalipto del arcoiris, pero también se le llama Kamarere en Papua Nueva Guinea, Bagras en las Filipinas o Leda en Indonesia.
Un esbelto árbol que tiene cómo hábitat natural las latitudes del trópico, aunque debido a la inusual belleza de los colores de su tronco, se ha extendido a otras zonas como árbol ornamental.
Pero este árbol no sólo es asombroso por su colorido, además posee otras cualidades que lo hacen realmente sorprendente: Es uno de los árboles de más rápido crecimiento, llegando con relativa facilidad a los 50 metros en tan sólo 20 ó 25 años.
Y es grande... se han encontrado numerosos casos con más de 70 metros de altura...
Eso sí, necesita terrenos fangosos y húmedos donde extender sus raices y, sobre todo mucha luz.
Evidentemente, lo primero que me llamó la atención fueron sus colores. Estamos acostumbrados a ver árboles con un gran despliegue de tonos en sus hojas... sin embargo, este es el único árbol que he visto, en el que el colorido emana de su tronco...
Una belleza delicada, puesto que el kamarere posee la corteza más delgada (3 mm) de todos los eucaliptos y por lo tanto es extremadamente sensitivo a los incendios.
Fuentes y más información:
Todas las fotografías de este Post están bajo Licencia Creative Commons y enlazadas a su fuente original. Para más información sobre este curioso Eucalipto, os dejo el enlace a la Wikipedia, aunque está en inglés y es muy breve, y un PDF mucho más interesante sobre el Kamarere.
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